Ir al contenido principal

ENCLAVE ARQUEOLÓGICO PUERTA DE ALMERÍA.

Muy cerquita de nuestro colegio se encuentra el Enclave Arqueológico Puerta de Almería, en el Parque Nicolás Salmerón de la capital almeriense y hasta allí se ha dirigido nuestro alumnado de tercero y cuarto de primaria.
Puerta de Almería alberga por un lado, los únicos restos arqueológicos romanos conservados en la ciudad: una factoría de salazones; y por otro, una de las puertas de la muralla islámica que cerraba la ciudad por el sur. 
Los salazones eran un tipo de industria propia de las zonas costeras, muy frecuentes en todo el sur peninsular y el norte de África. Estas industrias constituían uno de los pilares fundamentales de la economía y comercio de estos enclaves marítimos. Salar el pescado era imprescindible para su conservación y era la única forma que tenían de llevar el pescado a los sitios de interior.

El lienzo de muralla conservado en el enclave arqueológico Puerta de Almería pertenece al cinturón de muralla que cerraba la ciudad por el sur, es decir, el frente que daba al mar. La construcción de esta muralla data de mediados del sigloX pero, por su situación, estará en uso durante toda la época islámica, conservándose hasta el siglo XIX en el que serán derribadas para abrir la ciudad al mar.

En el tramo conservado existen los restos de una puerta que se abría entre dos torres cuadrangulares que protegían al entrada. Esta Puerta, que sólo se conserva a nivel de cimientos, medía 6 metros y dada la cercanía al lugar en el que se construían los barcos, algunos autores han interpretado que podría tratarse de la puerta de las atarazanas.